dc.description.abstract | Desde la antigüedad el hombre ha tratado de mejorar su nivel de vida creando
numerosas herramientas que le facilitasen el trabajo, sea cual fuere la actividad a
realizar: caza, agricultura, ganadería, minería, construcción, etc. Sin embargo, cuando
hablamos del desarrollo y fabricación de explosivos, tenemos que referirnos
obligatoriamente a los periodos de guerra, porque fue en estos lapsos de tiempo cuando
los explosivos se desarrollaron con más vigor.
Este gran progreso de los explosivos en los períodos bélicos es debido al gran poder
rompedor y destructor que atesoran. Precisamente en esta característica, es donde
radica la grandeza de su utilidad industrial, ya que no existe ninguna otra reacción que
pueda generar mayor potencia mecánica que la detonación, lo la hace ideal para el uso
en minería y obra civil.
La humanidad tardó siglos en darse cuenta que las materias explosivas podían usarse no
solo para la guerra sino, también para mejorar el rendimiento de los trabajos de
explotación y la producción y, además, disminuyendo la carga física de los trabajadores.
En este aspecto, el intenso desarrollo que han sufrido los explosivos, sobre todo en las
grandes guerras, ha constituido un gran apoyo para el descubrimiento de explosivos
cada vez más potentes y, a la vez, seguros de fabricar, manejar y transportar,
constituyendo una enorme ventaja para su uso de manera industrial. De este modo el
trabajo que realizaban nuestros antepasados en la mina, cantera o en los trabajos de
desmonte, tunelado, etc. De manera precaria, hoy día se hace de manera totalmente
controlada y segura con los explosivos industriales. Lo comentado anteriormente se
puede observar claramente si hacemos una breve retrospectiva por la historia de los
compuestos explosivos. | es_ES |
Social media