La Isla, Santa Lucía y el mar: memoria descriptiva. Naturalización del sector levante de la bahía de Cartagena.

Abstract

En las últimas décadas la ciudad de Cartagena ha apostado por reconvertir su puerto marítimo. La principal actuación realizada hasta el momento ha sido transformar el antiguo muelle comercial de Alfonso XII en un espacio público dedicado al ocio, la cultura y el turismo: adecuación del espacio público, Museo Nacional de Arqueología Subacuática, Auditorio y Palacio de Congresos El Batel, nueva Terminal de cruceros, nuevo edificio del Real Club de Regatas… Cartagena es una ciudad portuaria en la que, como en otros casos, hasta el inicio de esta transformación, su puerto había permanecido al margen de la propia ciudad y sus habitantes. El desarrollo industrial colmató toda la línea de costa de la bahía y literalmente cerró la ciudad al mar. Sin embargo, la sociedad siempre ha demandado un lugar junto al mar, que posee un cierto magnetismo que invita a acercarse y disfrutar de sus virtudes paisajísticas y climáticas. El puerto es parte ineludible de la identidad de Cartagena, ya que es el motivo principal de su existencia y durante su larga historia ha sido codiciado por diversas civilizaciones y culturas. Dejando el gran legado arqueológico del que dispone la ciudad. El puerto siempre se ha encontrado en un fuerte desequilibrio en cuanto a su uso, primando el interés militar y comercial, causas principales de su actividad, y dejando espacios residuales al resto de aspectos. Es decir, el interés y uso ciudadano, social, cultural y de simple esparcimiento solo han podido acomodarse a aquellos rincones que no les resultaban útiles, temporalmente, a los principales usos. Entre los criterios más olvidados ha estado el medioambiental, convirtiéndose la bahía en un lugar estéril para los ecosistemas naturales e inaccesible casi todo él para los ciudadanos. Por ello se propone el desarrollo de un proyecto que cambie la relación de la ciudad con el puerto y la de este con el mar, capaz de introducir en la transformación de la bahía el paradigma medioambiental y la renaturalización del puerto. Con estos objetivos, el lugar de actuación es el sector oeste de la bahía, que corresponde con el actual Puerto de Contenedores y Mercancía General. Frente al Barrio de Santa Lucía. Se escoge este emplazamiento ya que se trata de la zona que se encuentra más degradada por la situación expuesta (falta de accesibilidad y deterioro medioambiental). Además, es conocido que este muelle ya no cumple adecuadamente los nuevos criterios de la industria marina del transporte de mercancías, habiendo expresado la Autoridad Portuaria de Cartagena su intención de trasladar estas instalaciones a otra ubicación. Esta porción el puerto se presenta, por lo tanto, como una valiosa oportunidad para reconfigurar la relación de la ciudad con el puerto y el mar, ofreciendo una alternativa al puerto comercial y de ocio que engarce la ciudad con su entorno natural. Además, permitiría acometer una contundente transformación de la relación del barrio de Santa Lucía con el resto de la ciudad y con el propio mar, utilizando el enorme y privilegiado espacio que ocupan las instalaciones del actual Puerto de Contenedores. Se propone entonces realizar un proceso de naturalización de ese espacio, suavizando su impacto sobre el medio ambiente e invitar a su progresiva restauración. Este espacio ha de ser el gran parque y espacio público abierto de Cartagena que articule la transición de la ciudad con el territorio y que, además, resuelva la integración de Santa Lucía.